LEYENDA..
La santa mano.
Mossen Cinto Verdaguer, popularizó un hecho misterioso ocurrido en el monasterio de Las Santas Creus.
En plena Edad Media antes de que llegaran los monjes, en el lugar donde hoy, se levanta el monasterio se veían constante mente por las noches extrañas luces acompañadas de estruendos. Por tal motivo al hacerse de día los campesinos ponían muchas cruces en el suelo para alejar a los malos espíritus qué por cierto, se suponía venían del Cielo
La leyenda dice que el enclave monástico había dos frailes muy amigos, que contrajeron un curioso compromiso el uno con el otro se comprometían a que cuando alguno de los dos falleciera ,el que quedara le rezaría cada día un responso en la tumba.
Un día se llevó la muerte de este, mundo a uno de los monjes Y el segundo cumplió fiel, con la promesa .¡Cuál sería su sorpresa al observar que en la tierra que cubría el cuerpo aparecía la mano del difunto que lo bendecía! y así día tras día.
Hasta que decidió explicarle al Abad el caso. Este acompañado de toda la comunidad se dirigieron la noche siguiente a la tumba milagrosa. Todos los monjes le cantaron un responso y a las palabras de requienes cat inpace volvió a salir la mano mortuoría y bendijo a todos los monjes.
En aquel momento el Abad quiso coger la mano que quedó desprendida del cuerpo y entre las manos del dirigente religioso.
Desde aquel momento fue venerada en el monasterio.Hasta que los monjes lo abandonan..
Con el nombre de la Santa Má.
Y decidieron trasladarla a otro monasterio vecino…
