El regalo de la falsa corona

 

 Por los años sesenta la televisión era una novedad en algunos pueblos españoles,

Se retrasmitió un evento importante como fue la boda de rey y Balduino de Bélgica y Fabiola, dama de compañía de Doña Pilar hermana del rey emérito.

En aquel tiempo en el pueblo solo había una televisión en el centro social que era del ayuntamiento. Así que nos concentramos allí para ver la boda mucha gente lo recuerdo perfectamente y eso que era una niña.

 He conocido que la corona que llevaba Fabiola. Se la regaló Doña Carmen Polo de Franco. Como era una gran entusiasta de las joyas. Está corona de piedras preciosas muy bonita la tenía puesta una imagen de la Virgen en una Iglesia de monjas en Toledo. Para hacerse con ella se la pidió a la superiora. ¡Esta le dijo!, Que bien nos vendrá, el dinero de ella ahora, pues tenemos que arreglar mucho en el   convento, así como esto y aquello total le pidió un millón de pesetas.

¡Esta vez no le salió gratis! como siempre le salía sus antojos en las joyerías.

Con el tiempo la pieza se veía como renegrida, la llevó a un joyero que le hiciera una limpieza. A los pocos días el joyero le llamo y le dijo ¡Ya sabe! que la corona no es verdadera de rubies ni piedras preciosas.

Así es que fue al convento y se lo cuenta a la madre superiora que se la vendió, más está exclamando dijo, oh Si, es que nos las hemos vendido una a una por las carencias que teníamos en el convento para poder sobrevivir.

Total, que tuvo que ponerle nueva pedrería para el regalo  de boda de la que sería nueva reina de Belgica .

Tuvimos ocasión de ver en televisión en España a la reina Fabiola muy guapa en aquel tiempo tan lejano ya,  en los principios de la televisión en blanco y negro.